Sovereign God / Dios Soberano

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ENGLISH

So far during 2021 I have been able to see how God has a purpose with EVERYTHING and how I must continue to learn to let go of my plans and trust His, which are always better than mine (I really believe that since I left Venezuela more than 2 years ago this has been a recurring theme in my life haha)

When I signed up to do the World Race 2021, I signed up for the Expedition route. This route focuses on going to the 10/40 window and unreached people groups -God has placed a special burden on my heart for serving these people who have not yet heard about Jesus- Due to COVID, plans changed and our route changed to start in Central America. (Wait.. WHAT? Will I ever make it to the 10/40 window Lord?) This made me a bit sad, but at the same time it was exciting to think about being able to share God’s love in my heart’s language!

So the plan was to go out with my team to our first stop: Guatemala. But I started 2021 with COVID. Literally on January 1st I took the test to be able to travel and it came back positive -yes, I was in Asia and traveling all over the US last year, and I got COVID while at home haha- Thank God I had no major symptoms, but I wasn’t able to travel with my group. I had to quarantine and wait another week for a negative result.

This was honestly a bit frustrating. I had a lot of questions: why? Don’t you want me to make this trip Lord? Many times when we go through trials we complain and begin to question God or our calling. We do not understand and we forget that He has a master plan beyond what we can see or imagine and that EVERYTHING, everything that we live He allows with a purpose. Sometimes we see that purpose, other times we will never understand why things happen. We have to trust that we have a good Father who uses everything for our good and his Glory.

Thank God in this case I could see that purpose. I arrived in Chicamán -a small town in the mountains of Guatemala- and my team and I had to quarantine. My leader Katie and I are the only ones who have had COVID so they allowed us to go out to market. (Thank goodness I had Katie with me! Buying food for 7 is pretty heavy) During that quarantine we learned to be grateful and not complain. We were able to see those days as a gift to grow as a team, get to know each other better, share testimonies and spend a lot of intentional time together before starting to serve and work with other people.

Our hosts Wesly and Katie have a ministry focused on reaching indigenous Poqomchí communities and equipping local pastors. We had the beautiful privilege of working with them (I’ll tell you a little more about our time in Chicamán in another blog). What a gift from God! He knows my heart, knows that I am passionate about unreached people groups and connected my team with this beautiful family.

Every test we go through, no matter how difficult, allows us to have a new revelation of God’s character. Job 42: 5 says “What I knew about you before was what they had told me, but now my eyes have seen you and I have come to know you.” In this case, it was amazing to see how God is a sovereign God. He knows everything and is in control of every little detail. I had COVID so that I could later serve my team in Guatemala. God opened doors for my team to be in the Chicamán mountains serving indigenous unreached people groups. 

Sometimes we are so focused on what we wanted or do not have that we miss out on what God is doing in the moment. God did incredible things through our team in different communities around Chicamán and I am excited to see what he will do at our next stop: Jacó, Costa Rica!

Please continue to pray for our team as they prepare to leave this week for Costa Rica where we will be serving for two months God willing. We need His provision, protection and wisdom to join in what He is already doing there. Open our eyes Lord! Make us sensitive to your voice and the guidance of your Holy Spirit! Prepare hearts and make a way, we are excited to see what you will do through us!

I also want to thank everyone who has decided to partner with me in what God is doing through this journey by supporting me not only with your finances but also with your prayers. I already have 80% of the funds I need to cover all expenses!! Serving in Central America during a pandemic is a miracle that God is doing and you are a yuge part of that. THANK YOU!!

1 John 3:20 “… that although our heart condemns us, we know that God is greater than our hearts and He knows everything.” 

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ESPAÑOL

En este 2021 he podido ver como Dios tiene un propósito con TODO y como debo seguir aprendiendo a soltar mis planes y confiar en los de Él que sieeeempre son mejores que los míos (en verdad creo que desde que salí de Venezuela hace más de 2 años esto ha sido un tema recurrente en mi vida jaja)

Cuando me anoté para hacer World Race 2021 me inscribí en la ruta Expedición. Esta ruta se enfoca en ir a la ventana 10/40 y los grupos no alcanzados -Dios ha puesto una carga especial en mi corazón por servir a estas personas que aún no han escuchado acerca de Jesús- Debido a COVID los planes cambiaron y nuestra ruta cambió para empezar en Centroamérica. (¿QUÉ QUÉ? ¿Será que algún día llegaré a la ventana 10/40 Señor?) Esto me entristeció un poco, pero al mismo tiempo fue emocionante pensar en poder compartir el amor de Dios en el idioma de mi corazón. 

Entonces, el plan era salir con mi equipo a nuestra primera parada: Guatemala.  Peeero empecé el 2021 con COVID. Literalmente el 1ero de enero me hice la prueba para poder viajar y salí positivo -si, estuve en Asia y viajando por todo US el año pasado, y me dió COVID estando en mi casa jaja- Gracias a Dios no tenía mayores síntomas, pero no pude viajar con mi grupo sino que tuve que estar en cuarentena y esperar una semana más hasta tener un resultado negativo. 

Honestamente esto fue un poco frustrante, tenía muchas preguntas: ¿por qué? ¿no quieres que haga este viaje Señor? Muchas veces cuando pasamos por pruebas nos quejamos y empezamos a cuestionar a Dios o nuestro llamado, no entendemos y se nos olvida que Él tiene un máster plan más allá de lo que podemos ver o imaginar y que TODO, todo lo que vivimos Él lo permite con un propósito. A veces vemos ese propósito, otras veces nunca entenderemos porque pasan las cosas. Nos toca confiar en que tenemos un Dios bueno que todo usa para nuestro bien y su Gloria.  

Gracias a Dios en este caso pude ver ese propósito. Llegué a Chicamán -un pueblito en las montañas de Guatemala- y mi equipo y yo tuvimos que hacer cuarentena. Mi líder Katie y yo somos las únicas que hemos tenido COVID por lo que nos permitieron salir para hacer mercado. (¡Gracias a Dios tenía a Katie conmigo! comprar comida para 7 personas es bastante pesado) Durante esa cuarentena aprendimos a estar agradecidas y no quejarnos. Pudimos ver esos días como un regalo para crecer como equipo, conocernos mejor, compartir testimonios y pasar bastante tiempo intencional juntas antes de empezar a servir y trabajar con otras personas. 

Nuestros host Wesly y Katie tienen un ministerio enfocado en alcanzar a comunidades indígenas Poqomchí y capacitar a pastores locales. Tuvimos el bello privilegio de trabajar con ellos (les contaré un poco más acerca de nuestro tiempo en Chicamán en otro blog). ¡Qué regalo de Dios! Él conoce mi corazón, sabe que me apasionan los grupos no alcanzados y conectó a mi equipo con esta bella familia. 

Cada prueba por la que pasamos, por más difícil que sea, nos permite tener una nueva revelación del carácter de Dios. Job 42:5 dice “Lo que antes sabía de ti era lo que me habían contado, pero ahora mis ojos te han visto y he llegado a conocerte” En este caso, fue increíble ver como Dios es un Dios soberano. Él todo lo sabe y tiene control de cada pequeño detalle. Yo tuve COVID para luego poder servir a mi equipo en Guatemala. Dios justamente abrió puertas para que mi equipo estuviera en las montañas de Chicamán sirviendo a grupos no alcanzados indígenas. 

A veces estamos tan enfocados en lo que queríamos o en lo que no tenemos, que nos perdemos de lo que Dios está haciendo en el momento. Dios hizo cosas increíbles a través de nuestro equipo en distintas comunidades en los alrededores de Chicamán y estoy emocionada de ver lo que hará en nuestra próxima parada: ¡Jacó, Costa Rica!

Por favor continúa orando por nuestro equipo mientras se prepara para salir esta semana a Costa Rica donde estaremos sirviendo por dos meses si Dios quiere. Necesitamos de Su provisión, protección y sabiduría para unirnos a lo que ya Él está haciendo ahí. ¡Abre nuestros ojos Señor! ¡Haznos sensibles a tu voz y a la guía de tu Espíritu Santo! Prepara corazones y abre camino, ¡estamos emocionados por ver lo que harás a través de nosotros!

También quiero agradecer a todos los que han decidido unirse a lo que Dios está haciendo a través de este viaje apoyándome no solo con sus finanzas pero también con sus oraciones. ¡¡Ya tengo el 80% de los fondos que necesito para cubrir todos los gastos!! Servir en Centroamérica durante una pandemia es un milagro que Dios está haciendo y ustedes son parte fundamental de eso. ¡¡GRACIAS!! 

1 Juan 3:20 “…que aunque nuestro corazón nos condene, Dios es más grande que nuestro corazón y lo sabe todo.”